header image

Assisi in the footsteps of Francis and Clare Spanish

Next Event
United-States-Flag  Spain-Flag  French-Flag

Despertarse en Asís

24 de Junio



Despertarse en Asísno es como despertarse en cualquier lado. Pero una vez que has conocido una mañana en Asís, es quizás un poquito más fácil despertar en cualquier otro lado en los brazos de Dios.

Los pájaros, volando y cantando; las campanas de las iglesias repicando; los verdes y dorados del valle abajo; un puro y desenfrenado aire entrando en los pulmones–todos los elementos aquí hablan de nueva vida. Cada día es un recordatorio visceral de la alegría y bondad de la vida y del amor.

Sirvo como maestra, guía y acompañante a personas enAsís cada año, y es un privilegio único de alegría  y bendición hacerlo. Caminamos en los pasos de Francisco y Clara de una manera que les permite  hablarnos a través de los siglos, hasta que ellos, también, están caminando con nosotros. Suelo decir que, cada año, yo veo a las personas enamorarse. Y es verdad. Nos enamoramos, de la vida y de Dios, de nuevo, cada año. Y los efectos son palpables.

En este blog, os invito a caminar con nosotros, desenfrenadamente, así como nosotros nos abrimos a las lecciones de estos seres humanos maravillosos y apasionados.


Chiesa Nuova



25 de Junio

El ADN de San Francisco es puro misterio.  Cómo Pietro di Bernadone, un comerciante agresivo de tejidos buscando su fortuna, y la amable Pica, con sus maneras provinciales elegantes, crearon uno de los mas sensibles seres humanos del mundo, es un testamento a las sutilezas del Espíritu. Seria difícil imaginar a dos personas más diferentes.

Visitamos la iglesia construida sobre la casa de nacimiento de San Francisco y las capas de la complejidad se desenredan. Francisco, aprendiendo canciones trovadorescas de su madre. Regresando a casa a altas horas de la madrugada  después de juerga y rebeldía. Aprendiz en el negocio familiar y aun soñando con hidalguía. Rescatado de prisión solo para encontrar su casa casi igual de conflictiva.

Nuestra visita a la Chiesa Nuova conmemora a ambas, la familia de origen y los conflictos y tensiones que un profundo cambio en una persona algunas veces provoca. En nuestras reflexiones notamos las dinámicas del crecimiento espiritual y los tipos de apoyo relacional que nuestro crecimiento requiere. Preguntamos cual de las relaciones de nuestras vidas estánayudándonos a crecer hacia nuestro potencial de desarrollo espiritual y humano, y crecemos en gratitud por aquellos que caminan con nosotros en el viaje.


Perugia

25 de Junio

En Perugia la trama solo se complica. En 1202, a la edad de 20 años, Francisco se une a otros en una caballería selecta para defender los intereses de Asís. Derrotado en la batalla en Collestrada, su armadura señala su valor potencial para sus captores, quienes se lo llevan de vuelta a Perugia y lo detienen para un rescate. Francisco paso ahí alrededor de un año como prisionero de guerra.

Lo seguimos a Perugia, donde vemos primero la Galeria Nacional de Arte de Umbria, para observar las imágenes de Cristo, Maria y los Santos que adornan sus paredes. Silenciosamente contemplamos la belleza de la intimidad entre madre e hijo, la realidad del Dios vivo haciendo sagrada a la historia humana.

Satisfechos, descendemos las escaleras y caminamos silenciosamente a través del laberinto medieval sepultado bajo la ciudad moderna, donde es fácil imaginar el año de prisión de Francisco. Los contrastes de lujo e iluminaciónarriba, a la oscuridad húmedaabajo no pueden ser mas crueles.

Recordamos a todos aquellos aún atrapados en espacios de oscuridad, violencia, injusticia, y angustia y nos dirigimos a Asís para una larga conversación.


Iglesia de La Maddalena



26 de Junio

Despreciados por la sociedad y condenados a una vida miserable en colonias fuera de las murallas de la ciudad, los leprosos eran absolutamente dependientes de los pocos que se atrevieron a compartir el mismo ostracismo social que ellos vivían. El primer encuentro real de Francisco con los leprosos en 1206 fue la primera vez que tuvo conocimiento de ellos. Había varias colonias de leprosos en el valle de Spoleto, y el aprendizaje de Francisco en la empresa familiar y sus extensos viajes tendrían a él muy consciente de sus ubicaciones. Pero estas colonias eran lugares que Francisco siempre había evitado claramente. Las primeras fuentes mencionan cómo “el se cubría la nariz, no sólo cuando veía a los leprosos cerca, sino incluso cuando veía sus hogares a una distancia” y que “él solía decir que al ver a los leprosos era tan penetrante para él que en los días de su vanidad cuando veía sus casas aún a dos millas de distancia, se cubriría la nariz con las manos.”

El horror de Franciscopor la enfermedad, en la cual la carne crecía infectada y putrefacta hasta que las extremidades se pudrían, fue compartido por todos sus contemporáneos, que a menudo lo equiparaban con el pecado y la descomposición moral.

Estrictas leyes estaban en orden para impedir a los leprosos entrar en la ciudad y para asegurar la colaboración de los ciudadanos para mantener la ciudad libre de estos :

“Ningún leproso puede atreverse a entrar en la ciudad o pasear en ella, y si se encuentra a uno de ellos,cualquiera lo puede atacar con impunidad.”La lepra era una condición miserable y dolorosa, pero el sufrimiento que soportaron los leprosos era aún más que simplemente física. Fue emocional, relacional y social. Los leprosos no podían trabajar, no podían mantener contacto con sus familias, y no tenían identidad más allá de la de “leproso.”  Su ropa, con su plato de mendigo, y su campana de advertencia los establecía apartados del mundo, la colonia de leprosos era un lugar de extrema privación, aún en la muerte. No es de extrañar que Francisco se estremeció ante la idea de la colonia de leprosos. No era solamente disgusto por la condición física, sino que también era horror ante la impotencia absoluta y la vulnerabilidad de la gente de allí, muchos de los cuales no podrían alimentarse ni vestirse.

Nadie en la sociedad de Francisco podría o querría asociarse con los leprosos. Francisco sabía, aún cuando joven, que esto iba más allá incluso de su capacidad para quienesquerían llegar a los leprosos. Pero en el momento en que reconoció su quebrantamiento como en el mismo, una nueva sensibilidad nació. Y fue una ternura que Francisco llegó a conocer como la ternura de Dios. Como él mismo lo describe al final de su vida:

Cuando vivía en pecado, me resultaba muy amargo ver a los leprosos. Pero Dios me condujo entre ellos y yo los traté con misericordia.  Y al alejarme de mi vida pasada lo que resultaba amargo, se me cambió en dulzura del alma y del cuerpo.  Y después de esta experiencia pasó un poco de tiempo y ya no pertenecí más a este mundo.

La experiencia fue suficiente para cambiarlo para siempre, como él nos dice: “Y después me retrasé un poco, pero luego me fui del mundo.”

El profundo impacto de la presencia encarnada de Dios, especialmente en aquellos que han sido despreciados y rechazados, así como nuestras propias heridas como seres humanos, es parte de lo que honramos aquí, cuando visitamos la iglesia construida sobre una de las antiguas colonias de leprosos de Asís.


Iglesia de San Damiano

28 de Junio

La iglesia de San Damiano, fuera de las murallas, está vinculada indeleblemente a la “revolución de ternura” que empezaron San Francisco y Santa Clara. En un sentido San Damiano es la cuna del movimiento reformador.

Según el trabajo archivista de Arnoldo Fortini, el padre de Francisco había adquirido algunas de las tierras cerca de la iglesia. Así que Francisco podía haber conocido a fondo la iglesia arruinada antes del primer encuentro con Dios en la colonia de los leprosos. En cualquier caso, el espacio de San Damiano resultó ser un lugar perfecto para la reflexión y oración mientras buscaba Francisco el consejo de Dios cuando se le desvanecían sus sueños juveniles de caballería.

Para nosotros hoy, San Damiano es un sitio perfecto para buscar dirección, refinar los contornos del camino, y pedir a Dios, como según la tradición lo hizo Francisco, que “ilumine la oscuridad de mi corazón. Dame fe recta, esperanza cierta, amor perfecto, sentido y entendimiento para saber y hacer tu santa voluntad.”

Después de reparar la iglesia como respuesta inicial al mandamiento de Dios: “Francisco, repara mi hogar. ¿No ves que esta en ruinas?” Francisco le entregó el edificio a Clara, cuando ella se incorporó en la reforma. Ella vivió allí desde 1211/1212 hasta su muerte en 1253, y le acogió allí en 1224, cuando volvió a Asís desde la Verna después de su estigmatización. Bajo su cuidado y sostenido por sus oraciones, Francisco escribió su “cantico de las criaturas” un himno profundo de alabanza y gratitud a Dios por todos los dones de creación.

Se siente la presencia de los dos, Francisco y Clara todavía en este espacio sagrado.


La Verna

29 de Junio

Nuestro viaje termina en La Verna, lugar de profunda importancia para Francisco y para toda la tradición cristiana. La tierra aquí se le dio a Francisco en 1213, como un lugar “apto para retiro espiritual y renovación.” Durante su primera visita aquí, la tradición habla de una experiencia que tuvo Francisco en el cual Cristo hablaba con él tiernamente en amistad.

Hacia el final de su vida, en 1224, Francisco regresó a La Verna por un período de 40 días deoración y ayuno. Es esta estancia que ha sido inmortalizado en el arte y la literatura como la plena realización de la unión de Francisco con Cristo. La llamamos la “estigmatización,” en la cual se le pusieron las heridas de Cristo en la cruz. En su descripción de este momento en la vida de Francisco, Buenaventura describe cómo el amor ardiente de Francisco haciaDios ahora, literalmente brota de su cuerpo y la unión de los dos se ha encarnado.

Rodeado por la belleza penetrante del Bosque Nacional Casentine, nuestra estancia en La Verna hace que sea fácil de asentarse en el abrazo amoroso de Dios.

Translate »